La Concejalía de Urbanismo llevará al pleno de este mes de septiembre, que se celebrará el próximo miércoles día 28, la suspensión de las licencias urbanísticas en la zona afectada por el estudio previo del Tren de la Costa.
La concejal de Urbanismo e Infraestructuras, Mariló Jordá, ha explicado que dicha suspensión afecta, estrictamente, a los terrenos que están contemplados en la futura infraestructura ferroviaria, es decir, aquella área por la que hipotéticamente discurrirían las vías.
Esta restricción urbanística se toma a requerimiento del Ministerio de Fomento. De hecho, el pasado mes de julio, el Subdirector General de Planificación Ferroviaria del Ministerio de Fomento remitió un escrito al Ayuntamiento de San Vicente, sobre la aprobación provisional del Estudio Informativo de la línea ferroviaria Valencia-Alicante, conocida como el Tren de la Costa. Aunque el consistorio sanvicentero ha presentado alegaciones en contra del trazado, la Ley del Sector Ferroviario prevé «la suspensión del otorgamiento de nuevas autorizaciones y licencias urbanísticas hasta tanto se apruebe el estudio».
Así pues, por imperativo legal, el ayuntamiento ha de aprobar en sesión plenaria la congelación de licencias que, según detalla Mariló Jordá, “será por un periodo de un año máximo, a contar desde el día 8 de julio, que es la fecha en que se publicó el estudio en el BOE”.
Aunque la zona objeto de la suspensión de licencias urbanísticas viene contemplada en el estudio informativo, la arquitecta municipal ha elaborado un plano de detalle en el que se delimitan los terrenos. La concejala Mariló Jordá tiene previsto convocar una reunión informativa con los propietarios afectados.
Con respecto a las alegaciones al Tren de la Costa, la principal que ha presentado el Ayuntamiento de San Vicente se refiere al trazado. La propuesta es que transcurra en paralelo a la autovía A-70 y no pegado a la autovía de peaje AP-7, como proyecta el Ministerio de Fomento. Mariló Jordá considera que la propuesta municipal, “es más rentable desde el punto de vista socioeconómico, ya que conectará a municipios como Mutxamel, El Campello, Villajoyosa, Elche y Benidorm con la Universidad de Alicante y el aeropuerto”.
No obstante, el estudio informativo del Ministerio de Fomento estima que esta inversión es poco rentable. Además cuestiona la demanda que por parte de los usuarios tendría este futuro tren Alicante-Valencia. El futuro corredor ferroviario, cuyo coste podría superar los mil euros, se realizaría en cuatro fases: entre Gandia y Oliva (2017), entre Oliva y Dénia (2020), entre Alicante y Benidorm (2025), y entre Dénia y Benidorm (2030).