El que fuera presidente de la República Oriental del Uruguay electo por dos veces abogado, historiador, sociólogo y sobre todo, cómo le gusta autodenominarse, periodista, Julio María Sanguinetti forma parte desde esta mañana del claustro de ilustres doctores de la Universidad de Alicante. Su investidura como Doctor Honoris Causa ha tenido lugar en el Paraninfo. Presidida por el rector, Manuel Palomar, ha contado con la asistencia de expresidentes de gobierno de distintos países iberoamericanos como Felipe González, Ricardo Lagos, o Belisario Betancur, los empresarios, como Carlos Slim, Alejandro Bulgheroni y Enrique Manhard, políticos y altos cargos de organismos internacionales Rebeca Grynspan y académicos como Natalio Botana,
Durante su discurso, Sanguinetti ha abogado por “la tolerancia como sustento de la libertad”. Ha criticado los dogmatismos, “de los que no estamos ajenos en el mundo político” -ha asegurado- “cuando perdemos el valor de la libertad individual” y “el respeto a las minorías” y ha abogado porque sea en los claustros de las universidades “donde las ideas muevan a las civilizaciones”. Ha arremetido contra todo tipo de fundamentalismo, aplicado a las religiones, la política e incluso, la ciencia, de la que ha dicho que es “liberación pero también puede ser destrucción” y la ha calificado de “muy peligrosa” “cuando trasciende a las exactitudes y desborda sus propias personalidades”. “La moral y la ética han de encauzar los avances con racionalidad”, ha asegurado.
Julio María Sanguinetti ha arremetido contra los nacionalismos exacerbados, en los que históricamente “ha estado en la base de tantas arbitrariedades y padecimientos”. Por el contrario, ha defendido el patriotismo como “un sentimiento puro; el amor a la tierra de la que se siente hijo, eso es fundamentalmente amor”. Ha lamentado que aún en la actualidad hayamos de “seguir defendiéndonos de la intolerancia” y ha reconocido como labor del estado democrático el encauzamiento “de la libertad y la tolerancia, el alma del espíritu mismo de la libertad”.
El que fuera presidente urugurayo y actualmente presidente del Círculo de Montevideo, ha asegurado que “amamos la belleza con sencillez y el conocimiento sin arrogancia”, y ha terminado su discurso con una cita de la Escuela de Atenas: “la pobreza no es vergüenza, sino no hacer nada por superarla”.
Por su parte el rector, Manuel Palomar, se ha referido en su discurso a las claves estratégicas y las propuestas de actuación aprobadas en el III Encuentro Internacional de Rectores Universia, celebrado en Río de Janeiro en julio de 2014, conocidas como la Carta Universia Río 2014. Palomar ha alineado a la Universidad de Alicante con estos objetivos de impulso a “un Espacio Iberoamericano del Conocimiento socialmente responsable” y ha aludido al compromiso académico, científico, cultural y social con América Latina. Según el rector, con la investidura de Sanguinetti -“el segundo uruguayo que nos honra en nuestra máxima orla de honor, tras Mario Benedetti, cuya biblioteca madrileña custodiamos, investigamos y divulgamos”- “reforzamos nuestro compromiso con Latinoamérica”.
El nuevo doctor ha estado apadrinado por el catedrático de Ciencia Política y de la Administración de la Universidad de Alicante, José Manuel Canales, que ha destacado “la gran coherencia en su trayectoria vital, política, literaria y de divulgación”, pero sobre todo a “un líder político que creyó, practicó y defendió siempre la democracia, y que fue el impulsor de la transición en su país”, además de su “innegable liderazgo en el continente iberoamericano”. Canales ha resumido las tres facetas esenciales del homenajeado, la primera, “la de político experimentado y hombre de Estado; segunda, la de académico e intelectual consagrado y, tercera, la de publicista (columnista) en diversos medios de comunicación, ha” explicado.
