El alcalde de San Vicente, Jesús Villar, y las concejalas de Infraestructuras y Servicios Públicos y de Servicios Sociales, Mariló Jordá y Begoña Monllor, respectivamente, han expresado hoy la intención del Gobierno municipal de dar un impulso, a través de campañas de concienciación, al reciclaje de ropa usada en el municipio.
Los ediles han anunciado el esfuerzo municipal para aumentar el reciclaje de ropa en San Vicente durante el acto de entrega a Cáritas y a Cruz Roja de parte de los beneficios obtenidos por Texlimca, la empresa encargada de la recogida de las prendas usadas en el municipio. En concreto, cada una de las organizaciones humanitarias ha recibido 1.122 euros (seis céntimos por kilo de ropa recogida) de manos de Juan Carlos Aranda, responsable de Texlimca. Esta firma tiene 24 contenedores (de color azul claro) distribuidos por todo el municipio.
Mariló Jordá ha explicado que el reciclaje de ropa reporta beneficios mediombientales y ahorro en costes de recogida de residuos, mientras que Begoña Monllor ha mostrado su disposición a colaborar para realizar campañas de concienciación en centros escolares. El Ayuntamiento anima a todos los ciudadanos a depositar la ropa en desuso en los contenedores autorizados. De los 11 kilos de media de ropa que caen en desuso por persona y año, sólo entre uno y dos se recicla.
La ropa que se recoge en los contededores se reutiza en parte como prenda de vestir, pero buena parte de ella se transforma en trapos de limpieza industrial, relleno de cojines o bien como materia para generar energía.
La industria textil es la segunda más contaminante del planeta, después del petróleo, y es responsable de la emisión del 10% de los gases de carbono a nivel mundial. Materias primas como el poliéster, nylon o acrílico tardan en descomponerse alrededor de 400 años.
