El Ayuntamiento ha recibido el informe técnico final sobre la campaña extraordinaria de eliminación de residuos y vertederos incontrolados llevada a cabo San Vicente del Raspeig. En seis jornadas, del día 19 al 27 de septiembre, se han retirado 222.880 kilos de desechos acumulados en un total de 83 puntos, todos ellos situados en partidas, urbanizaciones y polígonos industriales del municipio.
El concejal de Servicios Urbanos y Mantenimiento, Antonio Díaz, ha hecho un balance positivo de la operación en la que “se han superado nuestras expectativas porque esperábamos recoger unas 222 toneladas de 50 vertederos ilegales y se han eliminado cerca de 223 toneladas y 83 puntos negros”. Según el edil “son cifras récord que se han logrado alcanzar en muy pocos días”.
El concejal ha alertado de que “a pesar del enorme esfuerzo realizado, si queremos mantener limpia la ciudad todos tenemos que implicarnos”. Con esa finalidad, Díaz ha pedido “la colaboración ciudadana para cumplir las normas de vertido e informar de comportamientos incívicos para que no vuelvan a proliferar puntos de vertido que suponen un gran riesgo para la salud y son difíciles y muy caros de eliminar, a costa de los bolsillos de todos los vecinos de San Vicente”.
En el plan extraordinario han participado peones especialistas ayudados por máquinas pesadas como retroexcavadoras y camiones. En las 223 toneladas de desechos recogidos se han encontrado escombros de obras, electrodomésticos y otros enseres del hogar y también residuos orgánicos y vegetales. Todos estos depósitos irregulares han sido trasladados al vertedero de Piedra Negra.
Esta medida de choque impulsada por el equipo de Gobierno ha sido ejecutada por un equipo especializado de la empresa Prezero con la supervisión de los servicios técnicos municipales, que han establecido la ruta de intervención. Solo en la primera jornada de trabajo se extrajeron 53 toneladas de 14 puntos negros.
En cada jornada de trabajo se ha intervenido en una media de 12 espacios, algunos de los cuales han requerido la dedicación de más de 3 horas por la elevada acumulación de vertidos. Entre los que peor situación presentaban figuran Tossal Redó y el Rodalet. En algunos emplazamientos ha sido necesaria incluso la colaboración de la Policía Local para regular la circulación para poder llevar a cabo las labores.
Labores de seguimiento
El concejal Antonio Díaz ha explicado que “la verdadera diferencia de esta nueva campaña de limpieza extraordinaria en vertederos es que no hemos dejado de hacer un seguimiento de los puntos donde se ha intervenido para observar si se mantienen en buenas condiciones”.
El edil ha apuntado que también se han realizado paralelamente algunos cambios en la ordenación del tráfico y en la señalización para evitar los depósitos incontrolados. Con esa misma finalidad se han eliminado algunos contenedores y se ha vallado zonas donde aparecen frecuentemente depósitos irregulares.
Díaz ha destacado que “esta es una nueva forma de gestionar: intentamos poner las medidas adecuadas para que no se repitan situaciones indeseables y pasar con bastante frecuencia por los lugares limpiados para observar cómo están en tiempo real, pero, a pesar de esto, no podemos evitar que vuelvan a aparecer residuos fuera de los contenedores sin la cooperación ciudadana”.
El plan de trabajo llevado a cabo en la campaña extraordinaria de eliminación de residuos ha recorrido numerosos puntos de vertido incontrolado situados en el camí d’Agost, la carretera de Castalla, las proximidades de la gasolinera del Tossal, Penyes Roges, Perdices, Sabinar Arcos y otras zonas de Sabinar. También se ha intervenido en camí Los Ramos, Holandeses, Escola, Mont Negre, Jovers, Villamontes, Curt, Pantanet, Coves, Petits, Carrusel, alrededores de Viveros Mari, Clot, Font de Sala, Fernandina Rodalet, Horta, Carretera de Villafranqueza, Guadiana, Rayo Gardenias, zona Teular, Sol y Luz, Rebosar, Sendera, Carreret, zona Girasoles. Otras zonas donde se ha incidido son Mahones, Collado, La Borinquen, Raspas, Cuevas, Marcona, Tubos y Manchegos, carretera de La Alcoraya, alrededores del Velódromo de la carretera Calamar, Canastell y Revuelta Tomás.