Con más ayudas sociales y más inversión en la promoción del empleo y la formación que nunca, y sin subir ni un euro ni los impuestos ni las tasas municipales, el Gobierno municipal (PSOE y Esquerra Unida) llevará a aprobación, a mediados de este mes de enero, su propuesta de Presupuestos para 2022.
A pesar de la minoración de ingresos por plusvalías (por sentencia del Tribunal Constitucional y la adaptación de la ordenanza fiscal municipal a la nueva legislación estatal), el Equipo de Gobierno ha logrado cuadrar unas cuentas sin subir la carga fiscal a la ciudadanía, en parte gracias al aumento de los ingresos del Estado sobre el año pasado (un 10,7%).
El nuevo pabellón de deportes es el principal destino del capítulo inversor, con 3,3 millones de euros. La adquisición de viviendas para el Parque de Alquiler Social, con 150.000 euros, es otra partida importante de este capítulo.
La presión fiscal por habitante de San Vicente, es decir el esfuerzo impositivo realizado por cada habitante en el pago de impuestos municipales (IBI, IAE, vehículos, construcciones y otros, así como las tasas) lleva congelada siete años. San Vicente es uno de los municipios que menos grava a las economías familiares. Según datos oficiales, la presión fiscal es de 432,79 euros por habitante, una cantidad menor que la media provincial (610,22 euros), la del Estado (655,64 euros) e inferior también que la media de rango poblacional (municipios de más de 50.000 habitantes) que asciende a 650,73 euros.
El alcalde de San Vicente, Jesús Villar, ha vuelto a destacar que ‘a fecha 5 de enero, están cerrados los presupuestos. Un año más, el Equipo de Gobierno ha trabajado para su presentación y aprobación.’ Villar también ha dejado claro en la rueda de prensa que ‘los impuestos en San Vicente llevan siete años congelados y la presión fiscal es moderada.’ Por último ha agradecido el gran esfuerzo de los técnicos de las diferentes áreas para tener un presupuesto en el que se poder llevar adelante proyectos y dar un buen servicio a la ciudadanía.’
El concejal de Hacienda, Alberto Beviá, de Esquerra Unida, que gestiona además las áreas de Comercio e Industria, Empleo y Desarrollo Local y Medio Ambiente y Parques y Jardines, ha valorado muy positivamente unas cuentas marcadas por la fortaleza económica del Ayuntamiento y con endeudamiento cero que, “gracias a la buena gestión de los últimos años, nos permitirá, además de las inversiones programadas, seguir gestionando proyectos del remanente del año pasado”.
El regidor ha resaltado que sigue derogada la ordenanza fiscal de ocupación de la vía pública con mesas, sillas y la de instalación de puestos y casetas, beneficiando a un sector muy perjudicado por la pandemia: la hostelería y la venta no sedentaria. “Son unos presupuestos justos, con líneas transversales de las que cabe destacar la protección social y el fomento del empleo. En concreto, es de especial relevancia la dotación presupuestaria de la plantilla de Servicios Sociales, con el objetivo de aumentarla estructuralmente en 19 personas. “Es sin duda una apuesta muy clara y decidida de este Equipo de Gobierno para dar un mayor servicio y de mejor calidad a las personas más vulnerables”, ha dicho Beviá, quien igualmente destaca el aumento de las subvenciones de los programas de fomento del empleo y de formación que permitirán la contratación total o parcial durante el año 2022 de 89 personas.
Beviá ha agradecido a los técnicos municipales el trabajo realizado, un esfuerzo que va a permitir “que San Vicente del Raspeig disponga de un presupuesto para afrontar con garantías el año 2022”.