Uno entretuvo a la víctima en la puerta de la casa mientras el otro accedió al interior para cometer el robo
La Policía Local de San Vicente detuvo el pasado fin de semana a dos hombres que presuntamente robaron joyas del interior de una vivienda del Paseo de los Olivos. Los hechos se registraron el sábado por la tarde. En la Central Radio de la Policía se recibió el aviso de que dos varones, uno con pantalón y camiseta negra, y el otro con camiseta azul y pantalón vaquero, acababan de robar en un domicilio del Paseo de los Olivos y habían huido con dirección hacia la Avenida de Haygón.
En el cruce de esa avenida con Paseo de los Olivos una dotación policial interceptó a un varón que coincidía con la descripción, el que vestía camiseta azul y pantalón vaquero, que resultó ser Manuel M. A., de 48 años de edad. Este hombre reconoció haber tocado al timbre del domicilio hacía escasos momentos, y haberse ofrecido para trabajar a la propietaria de la vivienda, pero negó estar implicado en el robo.
Ante lo manifestado por esta persona, los agentes se desplazaron a la casa de la propietaria, de 83 años, y tras entrevistarse con la víctima, ésta manifestó que efectivamente el hombre retenido tocó a su timbre y, tras salir a la calle, estuvo hablando un rato con él, ofreciéndose éste para realizar trabajos. Tras hablar ambos un rato el individuo se marchó y ella se quedó en el porche de su casa. Poco después escuchó ruidos en el interior de su vivienda y al entrar encontró a un individuo vestido de negro en su habitación. Según el relato de la mujer, el hombre cogió una almohada, le tapó con ella la cara y la trasladó a otra habitación para encerrarla.
La víctima expresó a los agentes su convicción de que Manuel M. A. trató de entretenerla para facilitar que su compinche le robara. Poco después otra dotación policial interceptó en la Avenida 3 de abril de 1979 a un individuo vestido todo de negro, que portaba una bolsa con objetos y tenía una actitud esquiva con la patrulla. Fue identificado como V. T. O., de 51 años de edad. Portaba multitud de joyas en el interior de una bolsa de plástico y algunas más entre sus ropas. Posteriormente la víctima reconoció las joyas como suyas y ambos individuos quedaron detenidos.
