La Junta de Gobierno Local ha dado el visto bueno a la segunda fase del proyecto se señalización de caminos vecinales por un importe de 16.940 euros. De forma paralela, el Ayuntamiento está tramitando una nueva ordenanza de números de policía para el diseminado que sustituirán la actual numeración por polígonos.
El objetivo de estos cambios es facilitar la localización de las viviendas diseminadas por la extensa malla de caminos del término municipal, ha asegurado la concejala de Urbanismo, Infraestructuras y Servicios Urbanos, Mariló Jordá. “En la actualidad existe una deficiencia tanto en información indicativa como de denominación de calles y caminos, déficit que este proyecto de señalización con la instalación de carteles en las principales intersecciones pretende solucionar”, ha puntualizado la edil.
En algunas de estas vías se han recuperado sus nombres tradicionales, una labor en la que ha colaborado la asociación cultural Cercle d’Estudis Sequet pero Sanet. En una primera actuación, caminos que discurren en las partidas de Boqueres, Raspeig o Canastell como el dels Petits, el Cocó, la Boquera, la Lloma Alta, el Pla Morant, la Casavella, el Clotet, el Calvari, l’Escola o Casa Verda, entre muchos otros, ya disponen de un poste con banderola en varios de sus tramos para facilitar su identificación.
Ahora se ha aprobado una segunda fase que afecta a la señalización de 46 vías, lo que completa todo el inventario de caminos y se materializa una reivindicación histórica de los vecinos de las partidas de San Vicente.
Esta nueva actuación cuenta con un presupuesto de 16.940 euros euros y consiste en la instalación de postes y placas señalizadoras con los nombres de los caminos, tanto en castellano como en valenciano, de chapa troquelada, con el escudo de San Vicente en bicolor (azul y blanco) y atornilladas sobre el poste.
