La Policía Local de San Vicente llevó a cabo entre el lunes 4 y el viernes 8 de este mes de febrero una campaña de vigilancia y control del transporte escolar. Se inspeccionaron los vehículos que prestan el servicio en el municipio, un total de ocho, “sin detectarse infracciones graves que puedan atentar contra la seguridad vial ni de los pasajeros”.
Las inspecciones realizadas por los agentes se efectuaron sobre los vehículos (autorizaciones y documentos, condiciones técnicas y elementos de seguridad, cinturones y sistemas de retención infantil), y sobre los conductores (permisos de conducción, tiempos de conducción y descanso).
La concejala de Seguridad Ciudadana, Maribel Martínez, ha resaltado la importancia de este tipo de campañas. “Hay que aplicar todas las medidas preventivas posibles para evitar los riesgos y minimizar al máximo los casos de accidentes, y nuestra Policía Local siempre va llevar a cabo las inspecciones necesarias para que el transporte escolar en San Vicente funcione de forma segura”, ha dicho la edil.
Se verificaron las condiciones técnicas y elementos de seguridad para la correcta realización del transporte escolar, incidiendo en todos aquellos apartados que recoge el artículo 4 del RD 443/2001, de 27 de abril, sobre condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores, tales como: existencia del botiquín, extintores, placas de transporte escolar, la presencia de un acompañante debidamente cualificado, la comprobación del correcto funcionamiento de las puertas de emergencia, la existencia de los martillos rompe cristales, comprobación del correcto funcionamiento de los cinturones de seguridad, dispositivos luminosos de señal de emergencia, dispositivo acústico y sincronizado con las luces de marcha atrás.
Igualmente se verificó que los conductores de dichos vehículos estaban en posesión de los permisos de conducción adecuados, así como del Certificado de Aptitud Profesional (CAP). A todos los conductores se les realizaron las correspondientes pruebas de alcoholemia.
Los diversos controles se efectuaron en la puerta de los centros escolares con los autobuses vacíos, bien después de la descarga de pasajeros o antes de la recogida de alumnos, según los casos, todo ello con la finalidad de ocasionar el menor perjuicio en el desarrollo del servicio del transporte escolar. Se han controlado e inspeccionado un total de ocho vehículos destinados a tal fin sin detectarse infracciones graves que puedan atentar contra la seguridad vial ni de los pasajeros.
Esta campaña está enmarcada en programa de la Dirección General de Tráfico, con la colaboración de la Inspección del Servicio Territorial de Transporte y Logística de la Conselleria.
