El Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig ha decidido dejar sin efectos y suspender el martes 21 de abril como festivo local. Así lo ha decretado el alcalde, Jesús Villar, este martes 31 de marzo. Se trata de una decisión derivada de la actual crisis del Covid-19.
El actual estado de alarma ha llevado a múltiples cambios en el calendario de 2020, como son los festivos locales. El pasado 12 de septiembre se aprobaron en Junta de Gobierno Local los días lunes 20 y martes 21 de abril como festivos locales. Unos días que tradicionalmente coinciden con las Fiestas Patronales y de Moros y Cristianos.
Tras decretarse el estado de alarma y por la situación que se está viviendo en el país, las Fiestas no se van a celebrar en estas fechas. Por ello, el Ayuntamiento ha decidido suspender el martes 21 de abril, sin marcar una nueva fecha festiva. El lunes 20, día del patrón Sant Vicent Ferrer, se mantiene como festivo en el calendario.
La propuesta de suspensión del día festivo ha contado con el visto bueno de las asociaciones de comerciantes y empresarios locales, el Mercado de Abastos, las cadenas alimentarias, el Centro Comercial.
El alcalde, Jesús Villar, ha señalado que “aplazadas nuestras fiestas Patronales y de Moros y Cristianos tras decretarse el estado de alarma, no podíamos continuar manteniendo este día como festivo. Más adelante estudiaremos donde ubicar esta festividad”.
La concejal de Fiestas, Asun París, ha explicado que “no tiene mucho sentido mantener este día como festivo local si su motivo era por la celebración de nuestras fiestas y éstas han quedado suspendidas”. La edil ha recordado que por otro lado, el lunes 20, día del patrón del municipio, San Vicente Ferrer, “es una fecha con arraigo social y cultural entre los sanvicenteros y sanvicenteras, por ello se mantiene se como festivo”.
El concejal de Empleo, Desarrollo Local y Comercio, Alberto Beviá, ha señalado que “todo lo que sea ahorrar costes y dar facilidades al comercio en estos momentos tan graves debe respaldarse desde el Ayuntamiento. Hay que tener en cuenta que apenas un cuarto del sector productivo de San Vicente puede seguir trabajando con motivo del cese de las actividades no esenciales”.